¿Te has planteado crear un jardín de plantas aromáticas donde los aromas y perfumes de las plantas sean tan atractivos como los colores?
Un jardín donde las plantas aromáticas son las reinas no pasa desapercibido, además, podemos disfrutar de intensos colores, aromas e incluso texturas al pasar la mano por encima de las plantas haciendo que desprendan sus increíbles aromas embriagadores.
¿Qué plantas aromáticas te recomendamos para tu jardín?
Lavanda
Es una planta mediterránea aclimatada a la sequedad, las altas temperaturas y resiste las heladas puntuales. La floración se produce a principios de verano, dando lugar a inflorescencias moradas que poseen un dulce aroma, que semejan una espiga.
Se emplea mucho en parques y jardines, creando zonas de plantas aromáticas, en rocallas y en terrazas. Tiene numerosas propiedades medicinales entre las que destaca como somnífero.
Romero
Al igual que la lavanda, es una planta mediterránea adaptada al riguroso clima mediterráneo. Hay que colocarlo en un lugar soleado con un suelo que drene bien, ya que es propenso a enfermedades producidas por hongos si el cuello de la planta se encuentra húmedo. Se debe podar con relativa frecuencia para mantenerlo joven y de forma compacta, ya que así crea nuevos brotes, evitando así que se forme leña.
La floración se produce en primavera con las primeras lluvias cubriéndose de pequeñas flores azules de un 1.5 cm.
Tomillo
Otra planta mediterránea a la que le gustan los suelos pedregosos y pobres, perfecta para rocallas o jardines con poco riego. Hay que colocarlo en un lugar soleado y bien drenado, ya que no soporta nada bien el exceso de humedad, ni la sombra. Esta planta no necesita ser podada debido a su pequeño porte, pero acepta muy bien los cortes a casi ras de suelo, fomentando nuevos brotes.
La floración se produce a finales de la primavera e inicios de verano, siendo muy decorativo cuando forma un tapiz con varios ejemplares.
Salvia
La salvia es una de las especies más populares, es poco exigente y muy generosa y se cultiva por su valor ornamental y aromático de sus hojas ovales y sus flores tubulares grandes y moradas. No necesita muchos cuidados, pero esta planta sí requiere un suelo más profundo y húmedo, debido a sus grandes hojas.
Florece a finales de la primavera, dando lugar a largas espigas de flores moradas de gran tamaño, atrayendo a multitud de insectos polinizadores.
Menta
Si tienes un suelo húmedo no hay anda mejor que la menta, esta planta aromática le encanta los lugares encharcadizos y húmedos. Además, da un aporte de color muy luminoso debido a sus hojas verde lima.
No necesita muchos cuidados, solamente controlar su tamaño mediante podas, que puedes aprovechar para infusiones o condimento culinario.
En definitiva, el cuidado de las plantas aromáticas es muy sencillo, tan solo necesitas colocarlas en lugares de paso soleados y mejor si es cerca de la cocina, para poder tenerlas a mano. No requieren mucho riego, ya que son plantas de clima mediterráneo adaptadas a largos periodos sin lluvia. Así que, si dispones de sitio para ubicar a estas plantas, no lo dudes, pues todas ellas son muy floríferas y alegran cualquier punto del jardín. ¡Nadie quedará indiferente al pasar delante de ellas!