Estamos en plena producción del crisantemo, la planta de Todos los Santos por excelencia. Florece en otoño y es una flor muy bonita y agradecida porque es muy resistente y fácil de cuidar.
Con la llegada de octubre llega el cambio estacional, las hojas de las plantas caducas comienzan a pintar de colores; rojos, naranjas, amarillos contrastados frente a todo tipo de verdes.